Contacto

viernes, 5 de enero de 2018

Se cumplen 48 años de esta carta de Perón al compañero Imperatrice




Carta a Carlos A. Imperatrice 5 de enero de 1970

Escrito por Juan Domingo Perón.

Madrid, 5 de enero de 1970.

Al Sr. Carlos A Iberio Imperatrice

Rosario

Querido amigo:

He recibido su carta del 15 de diciembre pasado y la larga lista de cargos que me hace. Usted no puede imaginarse el trabajo que tengo. En el año han venido a España no menos de 50.000 argentinos, de ellos la mitad pasa por mi casa. Los que no vienen escriben. Yo contra todos no puedo. Figúrese que, a pesar de la riqueza que se me atribuye, no puedo darme el lujo de tener ni Secretario ni escribientes y, en consecuencia, soy yo sólo el que debe atenderlo personalmente todo. Por eso es que hemos ideado hacerles llegar a las bases para que estén en claro una pequeña revista, "Las Bases" que se la enviamos y en la que Usted y todos los compañeros pueden tener idea clara sobre lo que el Comando Superior del Movimiento piensa sobre los distintos momentos de la situación argentina.

Ustedes deben comprender que desde 15.000 kilómetros de distancia yo no puedo hacer la conducción táctica del Movimiento, razón por la cual, debo tener allí una organización que se encargue de todo lo referente a esa actividad. Para ello está el Consejo Superior del Movimiento Nacional Justicialista, con su Secretario General al frente, aunque se discuta o no su capacidad. De los que han habido, ninguno ha satisfecho a todos y mientras unos dicen que es excelente otros sostienen que es malo, pero ninguno se da cuenta que es preciso que alguna autoridad tengamos, que se encargue de la organización y conducción. Sin una organización y una conducción que no tener ninguna. Tampoco es el caso que estemos cambiando todos los días de Secretario General porque entonces nos ocurrirá lo que a los locos, que están todos los días empezando.

En la actualidad existe en Santa Fe un Delegado Provincial que es quien tiene la responsabilidad de la conducción y organización en la Provincia, a él debe Usted recurrir para que le aclare situación y directivas porque si yo tuviera que dar directivas a cada uno de los dirigentes peronistas, no lo podría hacer por falta material de tiempo y posibilidades. Es preciso que entremos de una vez por todas en una organización, porque de lo contrario, la conducción es totalmente imposible. El Señor Bonino, Delegado de Santa Fe, recibe las directivas del Consejo Superior del Movimiento Nacional Justicialista, el que a su vez las recibe del Comando Superior del Peronismo. En esa escala es la única manera de poder enterar y coordinar todo el movimiento en la acción que ha de desarrollarse. Pero, si porque a uno no le gusta la cara del Delegado o del Secretario General, se pone sin más en contra, deberemos llegar a la conclusión que el Movimiento Peronista no se puede manejar de ninguna manera.

Ustedes deben comprender que la lucha debemos hacerla contra los enemigos y no contra los compañeros, porque de lo contrario, los únicos que ganan son nuestros adversarios, que ven facilitada su tarea. En la lucha, debemos comprender que, nos guste o no, "para un peronista no debe haber nada mejor que otro peronista" y por extensión, todos los que luchan contra la dictadura militar que azota al país, debemos considerarlos como compañeros de lucha. Lo contrario llevará directamente a una anarquía, de la que los únicos que sacarán ven¬tajas serán los enemigos que pretendemos combatir. Toda la energía que se emplea en combatir a los compañeros es negativa y debemos emplearla contra el enemigo común si queremos realmente ser efectivos en la acción.

Usted me pregunta sobre el compañero Ongaro: él está en la lucha contra la dictadura, nosotros también, qué duda puede haber que es un compañero de lucha y que debe ser considerado por todos nosotros como tal. Me pregunta también sobre lo que pasa en la C.G.T., cosa que más bien debería preguntarle yo a Usted. No sabe acaso que algunos dirigentes han traicionado al Movimiento al declararse "colaboracionistas" de la dictadura y que las "62 Organizaciones" están haciendo lo posible para neutralizar su acción y conseguir que la nueva C.G.T. sea de los trabajadores y no una Central Obrera sometida a la dictadura? En consecuencia, creo que no hay nada que preguntar: hay que estar con todo con las "62 Organizaciones". En cuanto a la actitud en el futuro, no es menos claro que, si el Movimiento Peronista, se enfrenta a la dictadura, todos los peronistas, les guste o no la cara del Secretario General, deben apoyar lo que la conducción táctica determine en cada caso. Lo contrario es favorecer a la dictadura militar que pretendemos combatir, se lo haga por una o por otra causa. Los que están viviendo allí, no pueden aducir que no están en claro porque, si yo a 15.000 kilómetros lo estoy, cómo podría explicarse que Ustedes allí no lo están?

Como ve amigo Imperatrice, el asunto es más simple de lo que a Usted le parece, todo depende en realizar la lucha sin ocuparse de cosas supérfluas de carácter interno, porque una cosa es luchar por el Movimiento y otra muy distinta no someterse a una conducción de conjunto, que es lo único que puede darnos soluciones también de conjunto. Nadie ha de realizarse en un Movimiento que no se realice. En consecuencia, superando todos los inconvenientes, es preciso que nos demos cuenta que luchar siempre es someterse a una disciplina y a una armonización y coordinación de conjunto. El que pretende luchar por su cuenta no sólo no llega a nada sino que termina por ser negativo aún para su propia causa.

Yo, como Jefe del Movimiento, tampoco hago lo que quiero sino lo que debo. Soy un peronista más, que tiene la responsabilidad del conjunto pero, no procedo jamás discrecionalmente, por mis deseos o mi pasión. Cuando tengo algo que resolver, lo hago apreciando fríamente la situación y resuelvo lo que más pueda convenir al Movimiento, me guste o no. Tampoco procedo con los hombres de manera discrecional, ni tengo compromisos ni obligaciones con nadie: yo me debo al Movimiento pero no a cada uno de sus hombres. Estamos viviendo días difíciles porque nos acercamos a la decisión que desde hace tanto tiempo estamos esperando y es. preciso que yo tenga la cabeza libre para apreciar y resolver.

Sobre las fotografías que me había encargado hace ya dos años, Usted comprenderá que después de tanto tiempo, con todo lo que yo tengo que hacer, más todos los que piden personalmente y por carta, se me haya olvidado y no tenga ya ni la lista de los nombres. Por otra parte, fotografías no se pueden mandar por correo porque las destruyen allí en el Correo antes de llegar. No hay tal "ingratitud" como Usted dice, ni tampoco falta de cortesía como refirma, sino imposibilidad de satisfacerle, dadas las circunstancias. Tengo pedidos por más de 10.000 fotografías lo que está parado por imposibilidad material de hacerlas y menos aún de remitirlas. Yo recibo diariamente más de cien cartas y soy solo para todo. Mi pobre Señora se pasa el día leyendo cartas y franqueando correspondencia. Usted imaginará que, frente a todo esto, yo también tengo derecho a descansar un poco.

Bueno amigo, creo haber satisfecho todas sus inquietudes y tratado de levantar todos sus cargos. No deje de contactarse con los compañeros que tienen las tareas de la organización y conducción del Movimiento y podrá disipar sus inquietudes, mucho mejor que lo que lo podría hacer yo desde aquí. Es preciso que los peronistas se vayan dando cuenta de la necesidad que sean ellos los que hagan la lucha, con iniciativa y decisión, sin necesidad de recurrir a la consulta previa al Comando Superior Peronista, cuya misión no es la conducción táctica sino la estratégica, que nada tiene que ver con las pequeñas cuestiones domésticas que se producen en el Movimiento.

Le ruego que salude a los compañeros y acepte, junto con mi saludo, mis mejores deseos de prosperidad y ventura para el año que se inicia.

Un gran abrazo.

Firmado: Juan Perón.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Evita

Evita Perón nació en el año 1919 en un pequeño pueblo de la pampa Argentina denominado Los Toldos, nombre que hace referencia al tipo de vivienda-las tolderías-, que utilizaban los indios que habitaron originariamente la zona.Dicen, los que saben, que el paisaje infinito de la pampa infunde en el ánimo de quien lo vive un sentido indómito de libertad y coraje, que no hay escuela que lo reemplace. Drieu la Rochelle, ese observador privilegiado,la definió como "un vértigo horizontal", y Ortega y Gasset como "promesa que promete".Este fue el genius loci en donde cayó Evita a la existencia.
Fue anotada y bautizada bajo el nombre de María Eva Duarte, hija de Juana Ibarguren Núñez y de su pareja Juan Duarte, quien nunca legitimó la relación. Juan Duarte, hacendado y concubino de Juana Ibarguren, muere en 1925 dejando a ésta y a sus cinco pequeños hijos -la menor Evita-en el desamparo más absoluto.No obstante ello, Juana con su máquina de coser, trabajando día y noche y guardando la dignidad, logra mantenerlos y educarlos.Evita comienza a manifestar su vocación artística y viaja a Buenos Aires, la gran ciudad cosmopolita, en donde se instala a partir de l934.Trabaja asiduamente en la radio e interviene en algunas películas.Diez años después, a causa del terremoto que asoló la provincia de San Juan,pegada a la cordillera de Los Andes,establece relaciones de noviazgo con el entonces coronel Juan Perón, con quien se casa en diciembre de 1945.Trabajó infatigablemente junto a él hasta su temprana muerte en 1952.
Hasta aquí los hechos más o menos puntuales de una biografía lineal para que el lector ubique cronológicamente a Eva Perón.Pero lo digno de destacar es su obra y su acción política y social.
Evita representó antes que nada el carácter argentino, heredaro seguramente de la visión de su pampa originaria que como el del gaucho es "indómito y soberbio".No se ató a los formales convencionalismos.Dañó los intereses privilegiados y benefició a los más humildes.Tuvo, como se dice hoy, "una opción preferencial por los pobres" y toda su gestión se dirigió en ese sentido.Pero nunca hizo "clasismo", ni al estilo demócrata cristiano ni al modo marxista. Ella fue simplemente peronista. No anduvo con medias tintas. No fue una mujer light como las que hoy día tienen poder al estilo de Hilary Clinton, sino una mujer dura, pesada.Que rigoreó a sus enemigos y protegió a sus "grasitas descamisados".Al respecto vale la pena recordar una anécdota:Desde el automóvil que la conduce a una recepción de gala, Evita ve una anciana llorando en la puerta de un Banco. Baja, entra con ella y pregunta: "Señores, ¿Quién de ustedes fue el hijo de puta que le dijo a esta señora `vuelva mañana`?".
Estaba convencida que el proyecto político de su esposo, el general Perón, de una "Argentina socialmente justa, económicamente libre y políticamente soberana" era posible y por su instauración luchó hasta el fin.
Fue Evita la que con tesón logró que la mujer argentina fuera la primera que votara en nuestra América. El voto femenino es un logro suyo casi exclusivo.Pero, y esto vale la pena destacarlo, ella no fue feminista.Lejos estuvo de la exaltación de la diferencia sexual a que nos tienen acostumbrados las feministas de hoy. Ella fue una mujer hecha y derecha, enamorada de su esposo, volcada hacia los más desprotegidos y amante de su patria.Su temprana muerte a los treinta y tres años, acaecida en pleno cambio de las estructuras sociales de la vieja sociedad conservadora, la transformaron lentamente en un mito fundador de los argentinos, lo mismo que Juana de Arco para los franceses. Incluso, siempre se ha hablado del gran secreto de Evita, y el padre Hernán Benitez, su confesor, ha afirmado muchas veces que "Ella caminaba en el sendero de Dios".Así pues, como dice el agudo pensador español Javier Esparza:"Que una golfa del show bussiness, y además gringa, encarne a Evita es, simplemente, un sacrilegio".
En manos del lector aparece en texto La Razón de mi vida
único que Evita redactara. Escrito entre los años 1949 y 1951 y cuyos cuadernos acaba de encontrar en España el investigar Jorge González Crespo desmintiendo así la versión "gorila=antiperonista" que afirmaba que el libro había sido redactado por un escriba a sueldo.
El texto está centrado en Perón y el apoyo a su proyecto político, económico y social. Y alrededor de él giran tres grandes categorías: los trabajadores, los humildes y las mujeres.Todo ello en vistas al logro de la "justicia social".Y esto lo hace notar expresamente Evita cuando, al comienzo mismo afirma:"Creo que así como algunas personas tienen una especial disposición del espíritu para sentir la belleza, más intensamente que los demás, y son por eso poetas o pintores o músicos, yo tengo, y he nacido con una particular disposición del espíritu que me hace sentir la injusticia de manera especial, con una rara y dolorosa intensidad".
Alberto Buela

VIDA DEL GENERAL JUAN DOMINGO PERÓN

El General Juan Domingo Perón fue electo Presidente de la República Argentina en 1946, 1951 y 1973. En todos los casos llegó a tan alto cargo por medio de elecciones democráticas.
La vida política de Perón tiene, por ello, dos excepcionalidades en América Latina: llegar tres veces a la Presidencia de la Nación y, aún siendo militar, las tres veces mediante el voto popular.
Fue fundador y jefe político del Movimiento Justicialista que aún hoy, a 30 años de su muerte, continúa siendo la fuerza política mayoritaria de la República Argentina (Partido Justicialista).
Perón dejó escritas múltiples obras (La Comunidad Organizada, Conducción Política y Modelo Argentino para un Proyecto Nacional, entre otras), donde expresa su filosofía y doctrina política, y que continúan siendo textos de consulta en el plano académico, aplicados a la vida política argentina y continental.

Infancia y primera juventud
Perón nació en Lobos (Provincia de Buenos Aires) el 8 de octubre de 1895. Fue hijo de Mario Tomás Perón, pequeño productor agrícola-ganadero, y de Juana Sosa, y nieto de uno de los médicos más célebres de su tiempo, el profesor Tomás L. Perón. Su familia es de origen sardo por vía paterna y castellana por vía materna. Su infancia y primera juventud las vivió en las pampas bonaerenses y en las llanuras patagónicas del sur de la Argentina, donde se trasladaron sus padres en 1899 en busca de trabajo. Estos escenarios de grandes espacios abiertos y de vida rural incidieron en su formación cultural que algunos biógrafos han denominado "criollismo". Perón deseaba ser médico como su abuelo, pero finalmente, en 1911, ingresó al Colegio Militar de la Nación, situado en los alrededores de la ciudad de Buenos Aires, y egresó en 1913 con el grado de subteniente del arma de Infantería.

Vida Militar
Como oficial joven ocupó diversos destinos militares dentro del país mientras fue ascendiendo en su carrera. Teniendo el grado de Capitán redactó trabajos sobre Moral Militar, Higiene Militar, Campañas del Alto Perú, El Frente Oriental de la Guerra Mundial de 1914. Estudios Estratégicos", que fueron adoptados como textos de estudio en las academias del Ejército.
En 1929 contrajo matrimonio con Aurelia Tizón en la Iglesia castrense Nuestra Señora de Luján, pero su esposa murió muy joven, en setiembre de 1938.
En 1930 ya era miembro del Estado Mayor del Ejército y Profesor Titular de "Historia Militar" en la Escuela Superior de Guerra. Continuó publicando textos militares y también redactó un estudio sobre el idioma de los indios araucanos, originarios de la región patagónica, bajo el título Toponimia Patagónica de Etimología Araucana (1935).
En 1936, con el grado de Mayor del Ejército, fue nombrado Agregado Militar en la Embajada Argentina en la República de Chile. Ese año ascendió al grado de Teniente Coronel. En 1937 publicó el estudio La Idea Estratégica y la Idea Operativa de San Martín en la Campaña de los Andes.
En 1939 integró la Misión de estudios en el extranjero que el Ejército Argentino envió a Europa, con residencia en Italia. Se especializó en Infantería de Montaña (alpinismo y esquí). Regresó a principios de 1940, luego de recorrer España, Alemania, Hungría, Francia, Yugoslavia y Albania. Fue destinado al Centro de Instrucción de Montaña (Mendoza) y en 1941 ascendió al grado de Coronel.
A partir de 1943 su vida militar comenzó a converger hacia la política, que lo iba a absorber totalmente hasta su muerte.

Vida Política
El 4 de junio de 1943, Perón participó en la Revolución militar que terminó un proceso de fraude y corrupción política, iniciado con el golpe militar de 1930, que había desplazado del poder al Presidente constitucional Hipólito Yrigoyen, perteneciente al partido Unión Cívica Radical. Perón tenía el grado de Coronel y formaba parte de un grupo de oficiales organizados en una especie de logia denominada GOU (Grupo Oficiales Unidos) que sostenía un pensamiento nacionalista y de recuperación ética.
En el gobierno militar, Perón comenzó ocupando cargos menores. En octubre de 1943, solicitó desempeñarse en el Departamento Nacional del Trabajo, un modesto organismo dedicado a los asuntos laborales y sindicales. El joven coronel inició, desde este lugar, su contacto con la clase trabajadora argentina, adentrándose en sus problemas y necesidades. Convirtió al modesto organismo en Secretaría de Trabajo y Previsión, amplió sus facultades y asumió su nueva titularidad el 10 de diciembre de 1943.
Desde allí impulsó la organización de los trabajadores en sindicatos, transmitiéndole al movimiento obrero una visión reivindicatoria y nacional del trabajo y promovió una legislación protectora inspirada en los principios de justicia social, difundidos, entre otras fuentes, por las Encíclicas papales.
A principios de 1944 conoció a María Eva Duarte que sería su esposa y a quién la historia ha inmortalizado con el nombre de Evita.
Por su desempeño en la Secretaría de Trabajo y Previsión comenzó a crecer la popularidad de Perón en la clase trabajadora, lo cual despertó desconfianza en muchos de los mandos del Ejército, que mantenían una concepción conservadora y elitista de la sociedad argentina. A tal punto llegó esta situación que, pese a estar desempeñando en 1945 los cargos de Vicepresidente y Ministro de Guerra del Gobierno Militar, el Coronel Perón fue obligado a renunciar a todas sus funciones el 10 de octubre de ese año. El día 13 fue llevado detenido a la Isla Martín García (situada en el Río de La Plata, frente a la ciudad de Buenos Aires).
Una vez conocida por los trabajadores la noticia de la detención de Perón, se declaró una huelga general espontánea en todo el país. Contingentes obreros comenzaron a marchar hacia la Casa de Gobierno, en la ciudad de Buenos Aires, cubriendo la Plaza de Mayo con una multitud que reclamaba su libertad.
Fue el 17 de octubre de 1945. Al anochecer de ese día y ante la presión popular, Perón fue puesto en libertad y convocado por los propios gobernantes militares a hablar a la multitud para calmarla.
Perón así lo hizo, pidió su retiro del Ejército y convertido en ex-militar se lanzó a la vida política. Tenía 50 años de edad.
Ese mismo mes de octubre contrajo matrimonio con Eva Perón.
El gobierno militar, debilitado por los acontecimientos, convocó a elecciones presidenciales para el 24 de febrero de 1946. Perón, con apenas cuatro meses de tiempo, presentó su candidatura con la fórmula Perón-Quijano y organizó sus bases políticas de apoyo que fueron los trabajadores, sectores independientes y desprendimientos progresistas de los partidos tradicionales como la Unión Cívica Radical, el Partido Conservador y el Partido Socialista. Su adversario fue un frente político denominado "Unión Democrática", conformado por los sectores más conservadores de la sociedad en alianza con la izquierda internacionalista, como el Partido Comunista, y apoyado abiertamente por el embajador de los Estados Unidos de Norteamérica, señor Spruille Braden. La disyuntiva fue "Braden o Perón".
Perón triunfó en las elecciones con el 52 por ciento de los votos y asumió la Presidencia de la Nación el 4 de junio de 1946. Ya en el Gobierno fundó el Movimiento Peronista. Comenzó una gestión de fuerte preocupación nacional y social.
En 1949 se reformó la Constitución Nacional mediante elección democrática de constituyentes y se incorporaron al máximo texto jurídico los nuevos derechos sociales, como también el voto femenino, que había sido aprobado en 1947, que reivindicaba a la mujer hasta entonces marginada de la vida política argentina.
En 1951 la formula Perón-Quijano fue reelecta por un nuevo período de seis años con el 62 por ciento de los votos.
En 1952 murió Eva Perón, "Evita", afectada por un cáncer. Se creó en torno a Perón un gran vacío afectivo.
En 1953 Perón planteó, en diversas exposiciones públicas, su pensamiento sobre la política exterior basada en los conceptos de "continentalismo" y "universalismo" con proyección al siglo XXI. Tomó las primeras decisiones concretas encaminadas a impulsar la integración latinoamericana y propuso a Chile y a Brasil echar las bases de una unión subregional que se denominaría ABC. Este proyecto es el antecedente del actual MERCOSUR instalado 30 años después.
El 16 de setiembre de 1955 el Gobierno constitucional de Perón fue derrocado por un golpe militar apoyado por los sectores más reaccionarios de la sociedad. Comenzó un largo período de proscripción política del Movimiento Justicialista, persecución a sus integrantes mediante fusilamientos, cárcel y destierro. Perón debió exiliarse. Este cruento período se extendió por 18 años, durante los cuales las Fuerzas Armadas asumieron el control político del país.
Perón se exiló en países latinoamericanos, conoció a una joven argentina, María Estela Martínez, “Isabel”, que se convertiría en su tercera esposa, y a partir de 1960 se trasladó a España donde vivió en Madrid hasta que pudo regresar a su patria por primera vez el 17 de noviembre de 1972 y, definitivamente, el 20 de junio de 1973.
El gobierno militar presidido por el Gral. Lanusse convocó a elecciones presidenciales para el 11 de marzo de 1973, pero proscribió a Perón. El Movimiento Justicialista ganó las elecciones con el 49,59 por ciento de los votos con la fórmula Cámpora-Solano Lima designada por Perón. Una vez en el gobierno, el presidente Cámpora renunció al cargo y se convocó a nuevas elecciones presidenciales sin proscripciones para el 23 de setiembre de 1973. El Movimiento Justicialista propuso la fórmula Perón-Perón (Juan Domingo Perón y su esposa Isabel Martínez de Perón), que obtuvo el triunfo con más del 60 por ciento de los votos.
Perón ya tenía 78 años y estaba enfermo. Murió el 1º de julio de 1974, mientras estaba en ejercicio constitucional y democrático de la Presidencia de la Nación por tercera vez.